- Nuki aterriza en España con su segunda generación de cerraduras inteligentes, Nuki Smart Lock 2.0
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El mercado mundial del hogar inteligente crece a un ritmo del 22’3%
Probamos un dispositivo esencial para nuestro hogar conectado. Una cerradura electrónica que funciona a través de WiFi y Bluetooth y que permite a los usuarios entrar a su casa sin necesidad de llevar llaves.
Cada vez más usuarios confían en un hogar digital instalando bombillas inteligentes, asistentes de voz como Alexa o Google Home, enchufes inteligentes, Smart TVs, etc. Tecnología que cada vez es más asequible y que todos entendemos y en la que confiamos; pero a la hora de instalar una cerradura inteligente como la Nuki las incógnitas aumentan considerablemente: ¿es seguro? ¿No es muy difícil instalarlo? ¿Es fiable? ¿Y si se queda el móvil sin batería? ¿Y se pierde la conexión WiFi?
Hemos probado la cerradura Nuki Smart Lock 2.0 y el Nuki Opener durante meses para resolver todas estas incógnitas y prejuicios sobre la cerradura inteligente.
¿PARA QUÉ SIRVE CADA PRODUCTO?
Los dos son muy distintos en cuanto a su uso y función
Aunque ambos productos que hemos probado tienen un nombre muy similar, los dos son muy distintos en cuanto a su uso y función.
Empezamos por el Smart Lock. Este es el producto insignia de Nuki, es una cerradura inteligente que cuenta con un motor para hacer girar la llave que debe de estar puesta en la parte interior de nuestra puerta de casa. Este dispositivo nos servirá para prescindir de las llaves de casa, pero no de las de la puerta de la calle, la puerta del portal o llave del edificio.
Para esto último está el Nuki Opener. Es un dispositivo que se conecta al telefonillo para poder copiar las funciones del portero: recibe los timbres, es capaz de silenciarlo y puede abrir la puerta. Eso sí, el Opener, al tenerse que comunicar con un portero, es posible que no sea compatible con todos ellos, así que conviene repasar en la página web de Nuki si nuestro telefonillo es compatible con este dispositivo. Además, como ahora veremos, su instalación es algo más compleja que el Smart Lock y su utilidad es menos universal.
LA INSTALACIÓN
Los prejuicios que nos hemos encontrado sobre este producto, fruto del desconocimiento del mismo, es buena parte sobre este apartado de instalación. No, no hay que cambiar la cerradura, ni la llave y sí, sí se puede adquirir a pesar de estar de alquiler. Es un proceso mucho más sencillo de lo que parece.
En la caja del Smart Lock vienen dos marcos o bases de acoplamiento. Usaremos una o la otra dependiendo de cuánto sobresalga nuestra cerradura de la puerta. Hay un marco que se podrá pegar solamente con un adhesivo y el otro con tres tornillos que se aflojan y aprietan con una llave allen incluida en el paquete.
Una vez asegurado el marco en nuestra puerta por dentro, metemos la llave y después el Smart Lock, que se acoplará perfectamente con el marco a cualquier tipo de llave independientemente de sus dimensiones y grosor.
La instalación del Smart Lock es muy sencillo, pero el Opener nos llevará más tiempo y algún quebradero de cabeza más
Es todo, ya está montado el Smart Lock. Un proceso muy sencillo que se simplifica con las instrucciones de la propia app, que son muy gráficas y contiene vídeos explicativos. Este proceso no debería de llevar más de 10 minutos.
Con el Opener, la instalación nos llevará más tiempo y algún quebradero de cabeza más, a pesar de que las instrucciones de la app sean también muy claras y gráficas. Para este dispositivo se tiene que abrir el portero y empalmar unos cables con otros con la ayuda de dichas instrucciones. Dependiendo del portero será una tarea más o menos fácil. En nuestro caso, nuestro portero era antiguo y con un solo destornillador y un tornillo desmontamos la carcasa del mismo para proceder al empalme de cables.
Después, ambos tendrán que ser conectados con el Bridge (el dispositivo que servirá de enlace entre nuestros dispositivos e internet) para que sean controlables desde la app ‘Nuki’. Para ello, se utilizará un indicador LED que incorpora cada uno de los dos dispositivos y el botón físico del que también disponen. Un procedimiento nada complejo sobretodo si ya hemos instalado alguna vez algún smart object.
Una vez ya conectados, las aplicación es del todo sencilla e intuitiva. Desde ella se tendrá acceso, además, a muchas opciones extras también desde relojes inteligentes. La app permite dar permisos a otras personas para que puedan abrir la puerta desde su propio teléfono: compañeros de piso, parejas, padres/madres, etc. Además, estos permisos pueden ser indefinidos o limitados en tiempo, es decir, si nos vamos tres días de casa y necesitamos que un amigo nos riegue las plantas, le podemos dar un permiso que dura solo esos tres días.
La app permite una configuración completa de la cerradura inteligente, dar permisos a usuarios indefinidos o temporales y ajustar aspectos como el número de vueltas debe dar la lleva al cerrar
También cuenta con una opción que se sirve de la localización de tu móvil para que, cuando ve que te aproximas a tu casa, el Opener active la función ‘Ring To Open’ que, como su propio nombre indica, abrirá la puerta con solo pulsar el timbre. También el Smart Lock tiene funciones inteligentes de ubicación. Cuando te acerques a tu casa y el dispositivo detecte el móvil del usuario, abrirá automáticamente la puerta del interior de tu casa.
Para darle más seguridad, desde la app se puede configurar un horario en el que la puerta permanecerá siempre cerrada. En nuestra prueba, establecimos que desde las 00:00 hasta las 8:00 del día siguiente la puerta estuviera cerrada con pestillo en Modo Nocturno. Al llegar las 00 pone el cerrojo y a las 8 lo quita. Y esto no impide que si un día llegamos a casa a la 1:00 no se pueda abrir la puerta, sí se puede, pero al pasar volverá a cerrar con cerrojo hasta las 8:00.
Además, la app móvil permite configurar otros aspectos relativos al correcto funcionamiento y personalización como cuántas vueltas queremos que le dé a la llave para cerrar, cuánto tiempo dejar entre que abre y cierra, etc.
En nuestra prueba también enlazamos nuestros dispositivos Nuki con Alexa únicamente, aunque también es compatible con el Asistente de Google y Apple HomeKit. Desde Alexa se puede pedir que abra y que cierre la puerta aunque nos pedirá un código de voz.
