Las empresas que paulatinamente regresan a sus colaboradores a los centros de trabajo pueden contar con una App que alerta de posibles contagios.
Por Ailyn Ríos
Las empresas que paulatinamente regresan a sus colaboradores a los centros de trabajo pueden contar con una App que alerta de posibles contagios y el nivel de riesgo en el que se encuentran en caso de que alguien resulte positivo.
Esto es parte de las soluciones que PwC desarrolló para ubicar a un colaborador dentro del centro de trabajo para monitorear el contacto que tiene con sus compañeros, medir la distancia que hay entre ellos durante la interacción y el tiempo que dura la misma para crear un semáforo de riesgo de contagio.
“Imaginemos que tenemos una empresa que con sus protocolos internos identifica que un colaborador dio positivo a Covid-19, en ese momento el administrador de sistemas entra a la herramienta e indica que tal persona dio positivo y genera un reporte que te dice en los 10 o 15 días anteriores con quién ha tenido contacto y el nivel.
“Básicamente es un semáforo de rojo, amarillo y verde, lo que hemos hecho es definir un algoritmo que relaciona los metros de distancia que has estado con una persona y relaciona el tiempo de esa interacción, en la medida en la que estés más tiempo y más cerca de esa persona estarás en el semáforo más rojo. (Así) las empresas activan los protocolos posteriores (al contagio)”, explicó Carlos Zegarra, socio de Management Consulting en PwC México.
La App también aplica un cuestionario diario al personal sobre su estado de salud y anímico para desempeñar las funciones, así las organizaciones pueden visualizar la productividad y establecer estrategias para mantenerla o mejorarla.
El cuestionario se puede realizar desde cualquier dispositivo, mientras que para implementar el monitoreo de contacto es necesario un smartphone con bluetooth que se conecta a un sistema de georreferencia que sólo está activo dentro de la empresa.
El socio urgió implementar este tipo de soluciones solamente en el lugar de trabajo con la autorización de los colaboradores, asegurar la confidencialidad de la información resultante del uso de estas herramientas y evitar la sobrevigilancia que podría derivarse de los datos obtenidos de la actividad de los empleados gracias a las Apps.
Zegarra puntualizó que, aunque las herramientas para el regreso seguro al trabajo están pensadas para organizaciones de cualquier tamaño, las medianas y grandes organizaciones son las más beneficiadas.
Compartió que el mercado para estas aplicaciones tendrá un crecimiento mundial de forma proporcional al regreso de los empleados a los centros de trabajo, condicionado a la apertura y condiciones sanitarias de cada país.
